Gética 2020

[ F I T C á n c e r - 6 ] 59 COMUNICACIONES PÓSTERES lo cual se ha visto correlacionado en algunos tra- bajos retrospectivos con el grado de respuesta a tratamiento. Además, la quimioterapia adminis- trada tras nivolumab está mostrando una eficacia inesperada, poniendo en valor la posible mejora de la respuesta a quimioterapia tras la inmuno- terapia también descrita en algunos trabajos re- trospectivos. Introducción: La pancreatitis inmunomediada se- cundaria a fármacos anti-PD1 es infrecuente (inci- dencia 0,94%), suele ser asintomática y aún no he- mos conseguido establecer una temporalidad clara. Pacientes: Presentamos 3 casos diagnosticados entre 2016-19. Caso clínico 1. Varón de 74 años tratado con nivo- lumab tras haber recibido QT neoadyuvante y ad- yuvante por un CNMP pT2N2, múltiples radiofre- cuencias por oligoprogresión pulmonar y cirugía y QT adyuvante por adenocarcinoma en colédoco distal pT1N0 con antecedente de pancreatitis pos- CPRE durante el diagnóstico. Tras 14.º ciclo acude a Urgencias por epigastralgia y vómitos, objetiván- dose hiperamilasemia sin otras alteraciones analí- ticas, radiológicas ni otros factores predisponentes (1). Recibió tratamiento corticoideo intravenoso (iv) inicial con paso a vía oral (vo) y pauta descen- dente rápida en una semana por considerar poco probable el origen inmunomediado. Al suspenderlo, volvió a ingresar con los mismos síntomas, mayor amilasemia y TAC sin cambios. Tras corticoterapia iv pasamos a pauta descendente vo cuatro semanas. Mantuvo enfermedad estable (EE) durante 5 meses más a pesar de haber suspendido nivolumab pero finalmente falleció en el contexto de progresión y otras comorbilidades (Intervalo libre de progresión (ILP): 12 meses) (Fig. 1). Caso clínico 2. Varón de 63 años que recibe nivo- lumab en 2.ª línea paliativa sin incidencias signifi- cativas hasta que, tras el 36.º ciclo, objetivamos un engrosamiento en cabeza de páncreas y aumento de la trabeculación grasa adyacente compatibles con pancreatitis (2), encontrándose el paciente asintomático y sin alteraciones analíticas. Recibió un ciclo extra de nivolumab y tras el mismo, ingresa CP17. Pancreatitis aguda sintomática en pacientes con carcinoma no microcítico de pulmón (CNMP) de estadio IV tratados con anti- PD1: ¿factores predisponentes? ¿Predictores? Cardeña, Ana; Sotelo, Verónica; Sánchez-Becerra, Virginia; González-López, Andrea; Esteban, Mónica; Moreno-Muñoz, Diana; Cámara, Juan Carlos; Hurtado, Alicia; Olier, Clara; Hernando, Alicia; Hernando, Susana; Mielgo, Xabier Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Alcorcón, Madrid por pancreatitis aguda sintomática con dolor, ele- vación de amilasa y lipasa, precisando metilpredni- solona 1 mg/kg/día para revertir la sintomatología. Tras finalizar pauta descendente permanece asin- tomático y actualmente sin evidencia de recidiva 5 meses después (ILP 23 meses) (Fig. 2). Caso clínico 3. mujer de 56 años, recibía pembro- lizumab en primera línea por un CNMP estadio IV con afectación cerebral resecada y radiada, en res- puesta casi completa tras 25 ciclos de tratamiento. Vino a Urgencias por pancreatitis aguda sintomática y varias colecciones peripancreáticas en TAC (3). Se inició metilprednisolona 1 mg/kg/día, con resolu- ción lenta del cuadro y permanece libre de recidiva 6 meses después. (ILP 24 meses). Destacar que los 2 últimos pacientes presentaron retrasos en el tra- tamiento por hipertransaminasemia G2 entre los ci- clos 6-10. ¿Pudo esto ser un aviso de lo que ocurrió finalmente? (Fig. 3). Resultados: Nos encontramos ante 2 casos de pancreatitis de grado II (1 y 2), y un caso de grado III (3), todas resueltas con corticoides y manteniendo respuesta durante al menos 5 meses tras suspender inmunoterapia. Nuestro primer paciente presenta- ba factores de riesgo para el desarrollo de pancrea- titis, pero los otros 2 no. ¿Por qué en el primero no tuvimos ese “aviso” cuando tenía más riesgo para desarrollar esta toxicidad? ¿Puede la hipertransa- minasemia considerarse un factor predictor de pan- creatitis inmunomediada tardía? Conclusiones: No debemos abandonar la bús- queda de posibles factores predictores de toxicidad inmunomediada para plantear tratamientos preco- ces y evitar riesgos para el paciente. Debemos dise- ñar estudios prospectivos para validar este tipo de observaciones.

RkJQdWJsaXNoZXIy OTU4MzI=